CARTA ABIERTA A LA COMUNIDAD

Hola mi nombre es Antonio Quiroga. Vivo en un pueblo al norte de la provincia de San Luis. Quería contarle hace 20 años mi hijo Roberto Ángel, terminados sus estudios secundarios sintió que la vocación de servicio a la comunidad lo llamaba decidió ser policía. Intento en la policía de la provincia pero lo bocharon por espina bífida…. argumentaron; no les creímos por ello decidí que lo examinaran en particular y nada que ver mi hijo no tenía nada. Estaba totalmente sano.
Su vocación iba más allá de los límites averiguo, se preparó, lo decidió: Ingresar Honorable Policía Federal Argentina. Había un pero. La condición económica nos ataba. Yo era trabajador rural (la categoría más baja). Esto no nos importo pues había que ayudarlo a lograr su sueño. Hicimos de todo….. hasta vendí la casa dónde estaba viviendo….. Todo por él…. Todo por un hijo. Y así fue pudo reunir lo solicitado. Pudo sortear las fases para ingresar a “la federal”. Estudió. Se perfeccionó. Se recibió. Guau! Que orgullo! El hijo de un trabajador rural se recibió de AGENTE DE LA POLICIA FEDERAL y nada más ni menos que en la pcia de BUENO AIRES!!!!! . EL tiempo transcurría. Su vida cambio. Nuestra vida cambio. Yo quería que se traslade de nuevo a nuestra provincia para que esté más cerca de su familia pero él me decía “NO PA, AGUANTEN UN POCO EN UN TIEMPITO LOS VOY A LLEVAR DE ESTE PUEBLO, TE QUIERO SACAR DE ESTE LABURO SACRIFICADO.” Sus visitas al pueblo eran llenas de vida, llenas de proyectos…Hasta que un maldito 29 de agosto de 1999 me lo MATARON, LO ASESINARON, uds (el lector) pensaran “en el laburo, en la calle?”….NO FUE EN EL MISMO DEPARTAMENTO CENTRAL DE POLICIA. Como pudimos nos trasladamos hasta allá, cuando nos avisan no nos dicen que él ya estaba fallecido, solo que había tenido un accidente pero mi instinto de padre me decía que había pasado lo peor. Llego a Bs. As. me dirijo; al Dpto. Central de Policía y me trasladan a la morgue judicial a reconocer el cuerpo de mi querido hijo ; no les deseo a nadie pasar por esta situación….Hago todos los trámites para traerlo a mi pueblo y darle cristiana sepultura. Lo traje y no es porque era mi hijo pero jamás había visto tanta gente en un sepelio. No tuve tiempo de hacer un duelo prolongado, no podía; debía averiguar lo que había ocurrido con mi querido “colorado” como lo llamaban en el pueblo. Volví a Bs As allí me puse en contacto con el periodista Enrique Sdrech, le conté mi situación y él me recomienda al Dr ROBERTO DAMBORIANA. Me entrevisto con el Dr. le expuse mi caso y el acepta tomar la causa y allí yo deposito toda mi confianza en él. Me hace firmarle poderes para representarnos ante cualquier situación legal, dado que yo no podía estar allí por la situación económica si no trabajaba no comía y mi residencia estaba lejos. Pasan los años el único contacto que mantenía con el Dr. Damboriana era por teléfono y como confiaba en su palabra y al no entender de leyes me quedaba tranquilo. Hasta que me avisa que su parte ya había finalizado porque el era de parte penalista y me lo recomienda al DR AGUSTIN CUZZANI para la parte civil. Al seguir mi confianza en él (Dr. Damboriana lo acepto y este me hace que le firme otro poder para poder representarme y seguir manejándome CON DR Cuzzani en la parte civil. Mi contacto con Dr. Cuzzani era telefónico. Seguía creyendo en ellos, hasta que pasado determinado tiempo note que las respuestas eran bastante esquiivas siempre las mismas falta poco, ya estamos a punto de finalizar, estamos cerca de concluir este juicio. Bueno seguía creyendo en ellos. Hasta que en año 2011 aproximadamente las comunicaciones se cortaron no me llamaron más ni Dr. Damboriana ni Dr. Cuzzani. Seguí insistiendo en comunicarme con ellos hasta que pude dar con Dr. Damboriana donde en esa última comunicación con un tono bastante enajenado me dice se acabó no hay nada más por hacer. No me explico nada más. Ni siquiera que había pasado con las personas que estaban acusadas de darle muerte a mi hijo. NADA DE NADA. QUEDE EN CERO. UN VACIO NO EN CUERPO SINO EN EL ALMA. Como reponerme de esto y seguir. No sé pero lo hice me puse de pie nuevamente. Y como los caminos de la vida se entrecruzan, gracias a unos amigos pude recién este año llegar a leer la causa. OTRO GOLPE AL ALMA.
COMO EXPLICAR LO QUE LEI?. PORQUE NINGUNO DE LOS DOS ABOGADOS NUNCA ME MANDO UNA COPIA DE NADA. Como explicar la sensación de haber descubierto una inmensa mentira. Era sentir que me lo mataban a ROBERTO frente a mí. NUNCA HICIERON NADA. MENTIRAS, MENTIRAS Y MÁS MENTIRAS. Me decían falta poco, falta poco para qué? En 2010 me decían falta poco para dictar sentencia cuando en realidad entre 2007-2008 habían sobreseído a las “personas” acusadas de matar a mi hijo. Todo quedo en la nada porque NO HICIERON NADA. Y ahora al cumplirse 20 AÑOS DE IMPUNIDAD Y de la desaparición física de ROBERTO “COLORADO”, QUIERO CONTARLES y CONTARTE QUE; sigo de pie RECORDÁNDOLO día a día y aunque esto quedo en la nada misma SEGUIS PRESENTE HOY MAS QUE NUNCA EN MI VIDA. EXTRAÑANDOTE SIEMPRE…. TAL VEZ INTENTANDO CONFIAR EN LA JUSTICIA DIVINA PERO CON LA FIRME CONVICCION DE QUE TU PASO POR ESTA TIERRA NO FUE EN VANO, PUDISTE CUMPLIR TU SUEÑO Y QUE POR HACER EL BIEN YA NO ESTAS A MI LADO. TE AMO HIJO, HASTA QUE NOS VOLVAMOS A JUNTAR.